⏱️ 2 horas 52 minutos 🧍8 Raciones
Ingredientes
Para la masa
- 250 Gramos de harina de media fuerza (mitad común y mitad de fuerza) o harina común
- 90 Mililitros de leche templada
- 50 Gramos de azúcar
- 1 Huevo a temperatura ambiente
- 8 Gramos de levadura fresca (o 3 gramos de seca)
- 35 Gramos de mantequilla en pomada o a temperatura ambiente
- 1/4 Cucharadita de sal
- 1 1/2 Cucharadita de cardamomo molido (no es imprescindible)
Relleno
- 40 Gramos de mantequilla en pomada suave
- 90 Gramos de azúcar mascabado
- 1 Cucharadita de canela en polvo
Antes del horno
- 1 Huevo batido para pincelar
- Azúcar perlado o en grano para decorar
- Cardamomo molido para decorar
Preparación
- En un bol (o en la amasadora) combinamos todos los ingredientes excepto la mantequilla. Amasamos 1 o 2 minutos, hasta mezclarlo todo, y dejamos reposar 5 minutos para que la harina se hidrate. De esta manera el amasado será mucho más sencillo.
- Añadimos la mantequilla en pomada y amasamos todo junto uno 5 o 6 minutos. La masa es algo húmeda y pegajosa, y está bien así. Debemos intentar no añadir más harina. Si nos es muy complicado amasarla, podemos hacer amasados de 1 minuto y reposos de 5 minutos 3 o 4 veces hasta poder formar una bola. No es necesario trabajar esta masa en exceso.
- Tras formas una bola, ponemos la masa en un bol engrasado y cubrimos para que no se reseque. La reservamos en un lugar cálido para que fermente, entre 1 hora y 1 hora y media, hasta que haya doblado de tamaño.
- Una vez nuestra masa haya fermentado, enharinamos nuestra superficie de trabajo y vertemos la masa.
- Hay muchas maneras de formar los bollitos de canela: una de ellas es en forma de rollito, como los clásicos cinnamon rolls. Para ello extenderemos la masa en forma de cuadrado, untamos el relleno por toda la superficie y enrollamos para formar una especie de brazo de gitano. Después, con ayuda de un hilo (suelo usar hilo dental) cortamos la masa en porciones de 3 cm.
- Otra forma de hacerlo es con la forma de moño de los clásicos bollitos suecos. Para ello extendemos la masa en forma de rectángulo de unos 50 cm por 25 cm. Untamos el relleno en 2/3 del rectángulo, y lo plegamos hacia el centro como un libro, poniendo primero la parte sin relleno y cubriéndola con el otro lado relleno. Estiramos un poco de nuevo el rectángulo si nos ha quedado muy pequeño, hasta conseguir que sea al menos de 20 cm x 30 cm.
- Cortamos tiras de la parte más larga del rectángulo de unos 2,5 cm de ancho. A partir de aquí, podemos formar con ellas un tirabuzón y después un moñito con él, o podemos enrollarlas un par de veces alrededor de nuestra palma cerrando el bollito por debajo.
- Si hemos hecho rollitos, podemos dejarlos reposar en un molde engrasado con una separación entre ellos de 3 cm. Así cuando fermenten se juntarán y no se abrirán. Si hemos hecho bollitos, los pondremos en una bandeja sobre papel de horno separados 6-8 cm, para que no se peguen entre sí. Pincelamos con huevo y dejamos fermentar cubiertos, para que no se sequen, unos 45 minutos o hasta que casi hayan duplicado su tamaño inicial.
- Cuando estén cerca de doblar su tamaño, pondremos el horno a precalentar a 190-200ºC (180ºC con ventilador). Antes del horno, volveremos a pincelar con huevo y podemos decorar con cardamomo molido y azúcar perlado o en granos. Si hemos escogido hacer rollitos, podemos saltarnos este paso.
- Horneamos unos 17 minutos, hasta que los bollitos se doren un poco. Podemos dejarlo un par de minutos más si vemos que están pálidos. Si por el contrario se doran muy rápido, podemos cubrirlos con papel de aluminio.
Para el relleno
- Combinamos la mantequilla ablandada con el azúcar y la canela y reservamos en un lugar cálido. Si el ambiente es frío puede que tengamos que calentarla 5-10 segundos en el microondas para poder extenderla.